En España preferimos ser víctimas

Estamos más contentos siendo los pobres desdichados atacados por la crisis y las múltiples miserias, que convirtiéndonos en los que cada uno con su gratito de arena, ayudan a salir del bache.

Ayer por la noche tanto Pzz como yo (Ppt) fuimos víctimas de una sociedad prodrida por dentro, astiada y consumida en su propia pesadez. No hay lucha, no hay coraje y ganas de levantarse. Mejor estar cruzados y esperar soluciones de "los de fuera" que buscarlas por nosotros mismos moviendo el meñique, dando guerra hasta que no nos quede aliento.

Huelga general del pequeño comercio coruñes.

Ayer por la tarde la ciudad sufrió una huelga del pequeño comercio por, dicen, tener nula capacidad competitiva de cara a los grandes centros comerciales que se están habriendo en La Coruña. El próximo, el Marineda Plaza, dicen que será la pedrada que los haga naufragar por completo rompiendo ya el de por sí frágil esquife en el que navegan.

Unas seiscientas personas, según los cálculos de la Policía Local facilitados por el Ayuntamiento, y más de seis mil, según los organizadores, respaldaron ayer la movilización convocada por la Federación Provincial de Comercio en defensa del sector tradicional. A esa cifra hay que sumar un seguimiento en el apagón y cierre de los comercios que Antonio Amor, presidente del Área Obelisco, elevó a «más del noventa por ciento, si exceptuamos las franquicias de las grandes cadenas». Otras fuentes oficiales rebajaron ese cálculo. «La ciudad ha seguido funcionando con total normalidad y apenas se ha percibido el llamamiento al apagón generalizado», insistieron.

El epicentro de la protesta se situó al pie del palacio municipal. «Estamos en esta plaza de María Pita que ha visto tantas reivindicaciones para decir que basta ya de injusticias y de agravios con respecto a las grandes superficies y que estamos hartos de esta situación», clamó el presidente de la Federación Provincial, Miguel Agromayor, desde el improvisado atril montado en la peana de la estatua de la heroína María Pita.

Fuente: lavozdegalicia.es

Pues señores míos, yo me meo de la risa en sus caras y defeco en sus idéas! Son ustedes los adalides de la libertad en el comercio de A Coruña, siempre al servicio del ciudadano ofreciendo su mejor sonrisa cada vez que entramos en sus locales, y con estas "protestas" pretenden que estemos con ustedes?

Ayer cuanta gente se fue a los centros comerciales más próximos a hacer las compras que ustedes les impidieron hacer? Saben ustedes, gurús de la economía que con ello lo que han conseguido es un conocimento de su competencia, la atracción de potenciales clientes fijo para los mismos, y un cabreo de órdago de los consumidores habituales del pequeño comercio? Si esta era su intención han dado de lleno en el clavo.

El comercio actual se está renovando. La era de internet deja huella y cala cada vez más en una sociedad que busca el mejor trato, la mejor compra para si misma, y no duda en dar un par de vueltas más para conseguirla. Es curioso pero preferimos coger el coche durante 15Km para comprar un pantalón 5€ más barato aún sabiendo que esos 5€ se van el gasolina. Pero los andamos, porque de esta manera compramos más barato y nos sentimos mejor, nos llenamos de optimismo y fuerzas para seguir adelante porque luchamos por superar nuestros problemas monetarios (aunque hagamos el panoli con estas prácticas de gastar en el viaje lo ahorrado en la compra).

El pequeño comercio quiere sobrevivir? Adáptense a los nuevos tiempos. Ya no basta con decir "soy pequeño, ayúdame", porque el que compra todavía lo es más y no le ayuda nadie, se tiene que buscar la vida. El comercio está a expensas de las necesidades del cliente y éste demanda rapidez, precios competitivos, comodidad, aparcamientos (ahora nos movemos en coche hasta para comprar el pan), y sintiéndolo mucho el comercio de barrio no da nada de eso. No quiero generalizar pero el comercio de barrio coruñes lo que te ofrece son productos desfasados, caras largas al atenderte si eres un desconocido o cliente poco habitual, presión en la compra, y "no me descoloques eso si no lo vas a comprar".

 No contentos con que la gente nos les compre se dedican a montar estas absurdas huelgas porque no es culpa suya que no haya ventas, sino del gran centro comercial de al lado que les jode la vida. Y como estamos de mala leche, despotricamos a saco y ponemos a parir de paso al Ayuntamiento local por ponernos aceras anchas, favorecer el transporte ciudadano en bus urbano (lo que a ellos les beneficia para que no cojamos el coche, medio de transporte directo a las grandes Áreas Comerciales). Seguro que hay mejores maneras de hacer las cosas, pero aún sabiendo que no a todo el mundo le gusta: si hacemos una ciudad de a pié, la gente no coje el coche o lo hace lo imprescindible.

Si yo vivo en una ciudad que me facilita el ir caminando/bici a cualquier sitio, si me hace agradable este trayecto con amplias aceras, jardines... Con un comercio competente que me da lo que necesito a escasos metros de mi casa, no cojo el coche y me papo 30 min de atascos para ir a un Centro Comercial a chupar de lo que las multinacionales me meten quiera no o no por los ojos.


Queremos lo mejor para nosotros y una de dos: luchamos por ello, o esperamos a que nos lo den.

Para mi entender lo que hace el comercio de A Coruña con estas huelgas es justo lo segundo. Protestando porque abren muchos centros comerciales no haré que los clientes vengan a mi local a consumir/comprar sino simplemente crearé una bronca momentánea que se disipará en poco tiempo, porque tenemos mejores cosas en las que pensar que en el prójimo.

Vale que los grandes centros comerciales están copados por grandes marcas y multinacionales. Por franquicias de productos que se venden por la tele y tienen más facilidad para llegar al comprador final. Pero qué son estos centros comerciales de ahora: pues amiguitos, son las galerias de ayer. Sí, esas galerías de comercios aglutinados de los que en su momento también se protestó. Y los supermercados a los que tan habituados estamos? Esos son los "grandes almacenes de alimentación" contra los que los ultramarinos de ayer tiraban piedras porque les sacaban el pan de sus hijos.

No soy deboto de nadie ni de nada, soy de los que buscan y rebuscan hasta quedar satisfecho y estar casi seguro (del todo uno nunca se queda verdad?) de que lo que compra le satisfará. Y si no lo hace se cabreará consigo mismo por haber fallado, pero mira "al menos lo he intentado". Por qué el pequeño comercio coruñés no hace lo mismo? Quieren protestar, que protesten! Pero después váyanse señores a la cama y reflexionen sobre los cambios que deben hacer ya, y la próxima evolución de sus pokemon-locales.

Porque amigos lectores, verdad que muchos de vosotros no os dan los aprobados por protestar al profe, o no os llegan los clientes por decirle al vecino que la cosa anda mal?