Mudanza express

Este post lo tenía en el tintero desde hace bastante tiempo, pero el exceso de curro de estos días y la desaparición de la tarjeta de memoria que contenía las fotos hicieron que sufriera cierto retrasillo.



Ante todo darles las gracias a nuestros vecinitos preferidos, Noe y Gael, que en cuanto los llamamos vinieron prestos a echarnos una mano, trayendo cajas y todo lo que nos hiciese falta. Los dos primeros días Pzz y yo nos las apañamos, pero el último día era el peor y puedo decir a ciencia cierta que no lo habríamos conseguido sin ellos.

Quieres seguir nuestra mudanza? Tras el salto tendrás fotos, fotos, y más fotos jajaja!






Imposible comenzar esta narración sin saber cómo estaba la casa, hecha unos zorros por supuesto. Cajas amontonadas, trastos superpuestos haciendo marabarismos increíbles, un caos total.







Al llegar de la boda de Los Zupes nos esperaba carretar lo que véis y mucho más. Uno no se hace la idea de qué es mudarse hasta que no lo ha hecho, es de lo peorcito que se le puede desear a nadie.

Llendo hacia casa, aún por Portugal, pensábamos como nos íbamos a mudar en 3 tardes, el tiempo que disponíamos tras salir de trabajar. Elemento clave para agilizar: transporte.



Las cajas, el carrito, las maletas, bolsas y todo lo que teníamos por casa con espacio para guardar fueron reclutados y ascensor echó humo de tanto viaje y sobrecarga.



Hasta mis coches no se libraron del carrito.




Pzz cargaba los armarios mientras yo carretaba cosas de un piso a otro.



Incluso haciendo alguna paradita para aprovechar el mercadillo ambulante en el que me había convertido.



El ascensor hizo bien su trabajo, el haber escogido pisos con ascensores grandes y de dos puertas ha sido una gran elección.



Muchas coñas en algún que otro viaje, pero vamos, que estábamos rendidos ya de madrugada...!



Pero al fin un piso vacío del que sólo quedaba la tele, pasó a convertirse en un hogar lleno de recuerdos y vacío de los que quedan por venir.





Ahora es momento de montar, ordenar, reconstruir, rearmar y avanzar. Así me ayudó Piña a reconstruir nuestro dormitorio.






Evidentemente el IKEA está sufriendo constantes visitas por nuestra parte. Los momentos después son los que más me gustan, recordando la juventud montando Tentes. Ahora las piezas son más grandes y tengo taladros gordos :p




Se m´an quedao bastantes fotos en el tintero, pero aquí las tenéis todas cotillas :)

Mundanza Express

1 comentario:

prinzezitarosa dijo...

Ufffffff.... Sin comentarios...

¡¡Vecinitos, gracias!!
¿Alguien me regala una Nexpresso?